Columna de Ignacio Figueroa: La crucifixión de Palestina
La importancia geopolítica de Palestina fue rápidamente entendida por los occidentales: región clave para dividir al islam entre sus poblaciones africanas y las asiáticas, una cuña en el corazón de la religión rival.

La historia del Medio Oriente está basada en el conflicto. Es una zona de frontera entre la cultura occidental y oriental; límite de religiones; pero preferentemente, encuentro entre diferentes razas. Occidente comprendió tempranamente la idea de que para obtener supremacía debía dominar los territorios allende el mar Mediterráneo.
Los primeros conflictos entre oriente y occidente ocurrieron en la época de la civilización griega, amenazada por el gran imperio persa. Así se sostuvieron diferentes encuentros militares conocidos como las Guerras Médicas.
Existieron diferentes períodos en que el choque civilizatorio adquirió fases álgidas, como las guerras entre Roma y Cartago por el dominio del Mediterráneo, conflicto ganado por el primero cuando logró la unidad política de carácter imperial (dominio) de los pueblos italianos, y, posteriormente, europeos.
En tanto, las poblaciones asiáticas con la llegada del islam lograron la unidad política que se manifestó en la expansión hacia el occidente. Específicamente hacia la península ibérica, lo que se sintió como una amenaza existencial para toda Europa.
Redención de los pecados
Posteriormente, los turcos selyúcidas dominaron sobre el Mediterráneo, pero occidente contragolpeó con las cruzadas. Lograron hacerse con Jerusalén y tuvieron posesión de las tierras de Palestina por 100 años. Los cruzados mostraron la rapacidad y crueldad que serían signos distintivos de la voluntad de poder (Nietzsche) occidental para hacerse con el control del mundo.
La importancia geopolítica de la región de Palestina fue rápidamente entendida por los occidentales. Era una región clave para dividir al islam entre sus poblaciones africanas y las asiáticas, una cuña en el corazón de la religión rival.
Desde allí, los sucesivos enfrentamientos adquirieron connotaciones religiosas, cosmovisión que enfrentaba a las dos religiones monoteístas, pero que escondían formas diferentes de entender el mundo.
La religión occidental se basó en creencias judeocristianas. Cristo es el salvador del hombre, pues, al sacrificarse en la cruz, permitió la redención de los pecados.
Sacrificio de los palestinos
La creencia principal del cristianismo es la del sacrificio para obtener una recompensa, ya sea en este mundo o en el otro. La esencia de la religión cristiana fue desfigurada por la Iglesia Católica al asumir un papel político preponderante en las naciones europeas. La traición de la Iglesia es contra el pueblo tanto como a las enseñanzas de Jesucristo. Este se decantó por la opción hacia los pobres, mientras los otros, por el poder del dinero.
En el siglo XX, la solución final de los nazis para acabar con lo que llamaron el “problema judío” es idéntico a lo que hace el sionismo (nacionalismo judío) contra los palestinos de Gaza. Sin embargo, es aún peor, porque los nazis escondieron su industria de la muerte a los ojos del mundo. Ellos, en cambio, lo exhiben con el orgullo de su superioridad racial por ser “el pueblo elegido de Dios”.
El Holocausto judío realizado por los nazis durante la Segunda Guerra Mundial dio origen al Estado de Israel. Los países de Europa y Estados Unidos entregaron las tierras de Palestina a los judíos que habían sido perseguidos y exterminados. El sacrificio de los hebreos logró su ansiado Estado, pero inició el sacrificio del pueblo palestino.
El poder del petróleo
Un crimen de genocidio dio origen a un nuevo crimen de genocidio. Se reconoció, implícitamente, que los judíos tienen un valor humano superior al de los árabes, en evidente oposición a los postulados de la Declaración Universal de los Derechos Humanos (DUDH) de la ONU de 1948. Los árabes palestinos no cabrían entonces en el género humano, ideas que han sido explicitadas por ministros del gobierno sionista.
El Estado de Israel se fundó también en 1948, por lo que la contradicción es evidente con la DUDH. Esto, porque el nuevo país se creó sobre las tierras pobladas por los árabes palestinos, expulsados de sus propiedades en lo que se conoce como la Nakba (“catástrofe o desastre”).
La razón geopolítica del origen del Estado de Israel se encuentra en la mantención del dominio occidental sobre Medio Oriente. Se creó una nación subsidiaria en el corazón de los países colonizados, aprovechándose de sus recursos naturales (petróleo).
Ideología supremacista
Israel como Estado, desde su génesis, estuvo marcado por las ideas racistas de desprecio y superioridad sobre los árabes. Pero, principalmente, esas ideas están instaladas en las mentes de la elite gobernante de Estados Unidos y Europa.
Siguiendo este racionamiento, se comprende por qué el occidente colectivo permite la “solución final” del sionismo para los habitantes de Gaza tanto como la amenaza para los países de Medio Oriente.
El sionismo vio en el Holocausto judío la posibilidad de hacer realidad su sueño de crear un Estado hebreo en las tierras de los palestinos. De esta forma, el sacrificio de los judíos europeos (la mayoría pobres de Polonia y la URSS) permitiría la concreción de su ideología supremacista.
La idea de superioridad racial judía es básica para el sionismo, como lo fue para el Nacional Socialismo, por lo que la expansión de Israel sobre otras tierras de Medio Oriente es una estrategia permanente en lo que han llamado El Gran Israel, como lo fue para los nazis la doctrina del “espacio vital” (Lebensraum).
La crucifixión de Palestina es tan grotesca, que los pueblos europeos lentamente comienzan a reaccionar. Protestas en España y otros países occidentales obligan al poder político a cuestionar a Israel. Los crímenes israelíes, al igual que los de los nazis, tendrán consecuencias geopolíticas con el proyecto de creación de un Estado Palestino.
Sin embargo, este Estado que se acepta construir desde occidente será vasallo de Israel, sin poder ni capacidad de defensa. Estaría hecho a la medida del pensamiento racista de Estados Unidos y Europa.
Un mundo multipolar
Aparte, el reciente ataque en Doha, Qatar, donde el Estado sionista intentó eliminar a la cúpula de Hamas que estaba negociando un alto al fuego en Gaza, provoca temor en los países de Medio Oriente, donde todos se sienten amenazados, incluso los aliados de occidente.
Esto llevó a que Pakistán y Arabia Saudita firmaran un acuerdo de defensa mutua. Crean un paraguas nuclear para el país árabe, que les permite mantener tranquilidad frente a la amenaza del Gran Israel.
Las contradicciones en Medio Oriente podrían morigerarse con el fin del pensamiento racista sionista. Pero este está arraigado en la mentalidad de occidente, por lo que el conflicto solamente podría terminar con la construcción de un mundo multipolar, donde no domine exclusivamente la raza blanca colonialista occidental.