Ordenan internación de menor de edad por homicidio en fiesta clandestina
El adolescente fue imputado por el crimen de un joven de 19 años ocurrido tras una riña en una vivienda conocida como “Casa Piedra”, en Antofagasta. La justicia decretó 90 días para investigar el caso.
Jonathan Delgado, de 19 años, víctima fatal de la riña en "Casa Piedra" / Foto: X (TWITTER)
El Juzgado de Garantía de Antofagasta ordenó la internación provisoria de un adolescente de 16 años, identificado como M.A.I.P., imputado por el delito de homicidio tras una violenta riña ocurrida durante una fiesta clandestina.
La decisión fue adoptada por el magistrado Hans Durán, quien consideró que su libertad representa un riesgo para la seguridad pública.
Violenta madrugada en “Casa Piedra”
De acuerdo con la Fiscalía, el hecho ocurrió durante la madrugada del 31 de agosto, cuando la víctima, un joven de 19 años identificado como Jonathan Johan Delgado Hidalgo, participaba en una celebración no autorizada en el inmueble conocido como “Casa Piedra”.
En el lugar se produjo una pelea entre varios asistentes, entre ellos el imputado, la que posteriormente se extendió hacia la vía pública.
Riña con desenlace fatal
Durante la confrontación, el menor habría atacado a la víctima con un arma blanca, provocándole al menos tres heridas penetrantes en el tórax y abdomen. Las lesiones derivaron en una anemia aguda que causó su fallecimiento en el sitio del suceso. Tras el ataque, el agresor huyó, siendo posteriormente detenido por efectivos policiales.
El tribunal determinó un plazo de 90 días para desarrollar la investigación a cargo del Ministerio Público, mientras el adolescente permanecerá internado en un centro del Sename.
Según estadísticas del Ministerio del Interior y Seguridad Pública, la Región de Antofagasta ha experimentado un aumento sostenido de delitos cometidos por menores en los últimos años, particularmente homicidios y robos con violencia.
Expertos en criminalidad juvenil advierten que factores como la participación en fiestas clandestinas, la falta de supervisión familiar y la presencia de pandillas incrementan el riesgo de incidentes graves, lo que mantiene alerta a las autoridades locales frente a la seguridad de adolescentes y la comunidad en general.
